Una mina de leyendas :: Los autobuses no atraviesan el barrio

Este verano nos embarcamos en nuestra propia nave del misterio para adentrarnos en la dimensión donde se encuentran las leyendas y las historias para no dormir.

Creemos que existe una quinta dimensión mas alla de lo que conocemos. Una dimensión tan basta como el espacio infinito. Se trata del punto exacto entre la luz y la oscuridad, entre la ciencia y la superstición. Existe entre el abismo de los miedos del hombre y la refulgencia de sus conocimientos.

Bienvenidos a nuestro barrio, una mina de leyendas inagotable… Esta semana hablamos de si los autobuses entran o no en el barrio.

Al construir a toda prisa el barrio, olvidaron como entrar y salir de él. Hacerlo no era nada fácil en esos primeros dias, años. Sólo el autobús de la línea 43 estaba ahí y ha sido el enlace històrico entre La Mina y la(s) ciudad(es). Entrar y salir de La Mina en transporte privado, tampoco era tarea para  principiantes. Calles, siempren hubieron pocas

Mina Vella 1
(foto Arxiu Històric de La Mina)

Con el tiempo las cosas han mejorado mucho. Ahora el barrio reurbanizado está circumvalado por la Ronda Litoral, una via rápida y olímpica de gran capacidad que ya empieza a quedar pequeña (aunque el precio de la gasolina igual lo impida)  que tiene una salida, la número 26, directa al barrio….y al Port Fórum….y a un megacentro comercial de prendas deportivas que confirma la vaticinada conexion francesa definitivamente consolidada en la nueva propiedad gala de parte del suelo de La Catalana.

Sólo hubo que esperar trece años para que el metro se acercara a La Mina. Ya se sabe, lo único que fué exprés en el barrio fue su construcción. En sus inmediaciones, en el vecino barcelonés barrio de Besós i el Maresme, acabó por llegar en el 82 el metro. Y no sin polémica.

Y ya en La Mina post-forum, remodelada y moderna, está atravesada por tres líneas del TRAM Besós, el nuevo tranvía del barcelonés: T4 (Ciutadella – Estació Sant Adrià, T5 (Glòries – Gorg) i T6 (Glòries – Estació de Sant Adrià).

Así que resuelto el aislamiento de La Mina, del que todavía quedan vestigios intangibles que la convierten en una especie de isla o quizas mejor en una península adrinaenca con el itsmo en Barcelona, pasamos a narrar un poco la historia de los tránsitos de y desde La Mina hacia el resto del mundo.

Autobuses:

 

Junto a la línia 43, que mantiene con pocas variaciones su recorrido histórico rodeando el barrio, durante un tiempo también La Mina conectaba con el mundo con el bus 41.
 

Autobús 43 (foto José Mora)

Con la llegada de la competència del metro recién inaugurado, en el año 83 se suprime la línia 41. Vecinos de Besos, La Mina i Poblenou se movilizan tímidamente. Escriben una carta al desaparecido periódico El Correo Catalán con poco éxito. Es el ensayo general de acciones futuras más contundentes.

La línia 41 existe actualemente, pero finaliza su recorrido en esa otra estación, Diagonal Mar, extremo hotelero de la Barcelona cosmopolita construido sobre los antiguos terrenos del Camp de la Bota.

Pero es la línea 43 la que tiene una historia que contar. Y otra vez la modernidad del metro actúa de forma determinante. Una vez ampliada e inaugurada la ampliación de la la línia IV del metro hacia los barrios del Besós, las autoridades del transporte deciden esta vez, suprimir la parte del recorrido del autobús 43 que se adentraba en Sant Adrià. Corria el año 1985.

Un grupo de unas 2000 personas se manifiestan en Sant Adrià contra ese cambio de recorrido que les deja sin el histórico autobús.  Las movilizaciones se alargan y el ayuntamiento propone que sea la linea 44 que asuma esa parte del recorrido que el 43 deja de hacer.

Pero vecinos y oposición municipal rechazan la propuesta. Continúan las protestas y algunos vecinos de Sant Adrià cortan la Nacional II, se hacen fuertes frente al ayuntamiento y realizan su obra cumbre, el secuestro de 9 autobuses. Y le cogieron cierta afición, por que más tarde en solidaridad con el barrio de Pomar y junto a vecinos de ese barrio badalones secuestran tres autobuses más y radicalizan la técnica de presión; se cuenta que corrían voces que los secuestradores amenazaban con estrellarlo si no se atendia sus demandas

Eran tiempos en que la población habia desarrollado esta técnica de guerrila urbana: muchos barrios de la periferia barcelonesa practicaron el secuestro de autobuses.

Uno de nuestros vecinos de ciudad, Javier Pérez Andujar, nos lo cuenta en primera persona. Reproducimos su narración de los hechos, extraída de su libro Paseos con mi madre.

[… ]
La gente reclama la línea del autobús que les han quitado con el pretexto de que pronto Sant Adrián va a tener metro. Pero mientras tanto, de ser un sitio al que tampoco nadie ha querido ir, San Adrián habrá pasado a convertirse en un lugar del que no se puede salir. Mujeres, hombres que dicen que sin bus ni metro no pueden ir al trabajo, o no pueden ir a estudiar los pocos que estudian fuera y los poquísimos del barrio que han entrado en la univesidad.

[…]

Al calor de las concentraciones de nuestros vecinos que reclaman su medio de tranporte, nos echaremos a secuestrar autobuses. El primero, uno de los largos, con acordeón en medio, de la línea 43, como los que Gallardo y Mediavilla sacaban en los tebeos de Makoki, iremos a buscarlo un amigo y yo. Pepe Alda, con su barba muy corta, de antiguo cenetero de los años setenta. Con Pepe Alda también voy a dar el salto mortal, o tal vez la pirueta del superviviente, que lleva de creer en lo político a creer más en la literatura, o en las fotografias, o en las pinturas, o en las películas. Pepe Alda y yo iremos esa tarde hasta el final de la calle Guipúzcoa igual que quien ha decidido llegar hasta el final de la historia, y nos subiremos en el primer cuarenta y tres que pase, y cada uno con un palo en la mano le diremos a la gente que se baje, y la gente va a bajarse sin decir esa boca es mia. Luego le pediremos al conductor que siga hasta Sant Adrián, que continúe como en la ruta que hacia antes, y sin creérnoslo nosotros el conductor va a hacernos caso. Los vecinos que hay en la concentración al ver aparecer un cuarenta y tres de repente en la plaza del ayuntamiento se volverán locos de alegria. Una fiesta espontánea irá extendiéndose por todo el barrio. El siguiente autobús vamos a traerlo ente más personas. En uno de los secuestros la Guardia Urbana de Barcelona nos perseguirá hasta la linde de Sant Adrián, aunque más bien va a dar la impresión de que nos está escoltándonos. Maravilosamente sin que nadie ni nada nos lo impida, nos pasaremos la tarde trayendo autobuses y así vamos a dejar por la noche toda la plaza rodeada de buses aparcados[…]“

Cómo consecuencia, el 43 mantuvo su recorrido más o menos cómo hasta ahora, por que la línea todavía tiene historia por contar.


43 en la Cochera de Levante – foto cedida por Villelite (Colección Anabel Andrés y Carlos Segura)

 

En la Barcelona pre-Fórum Universal de les Cultures,  el 43, antes de llegar desde la capital al punto más extremo de su recorrido ya en Sant Adrià, pasaba frente a las cocheras de TMB que ocupaban la isla delimitada por la calles Llull – Taulat – Prim. Seria por temas de logística, de infraestrucura (en las cocheras habrian baños para el alivio del conductor) u otros que desconocemos, el autobús tenía su parada de origen y final frente a esas cocheras llamadas de Llevant. Es decir, el final de la línia no estaba en el punto más extremo de su recorrido, sinó que hacía la parada de descanso unos kilómetros antes. Los pocos kilómetros que faltaban para llegar a La Mina y a Sant Adrià. Viajeros con ese destino más allá de la frontera barcelonesa, debían esperar a que el bus reemprendiera su recorrido, sumando no menos de 10 minutos a su viaje entre ciudades
 

TMB – Cochera de Levante – (foto extraída del flickr de Villelite)

El Fórum Universal de les Cultures, de forma colateral solucionó esa anomalía al derribar las cocheras de TMB para construir en sus terrenos el actual Parc del Fórum, lugar al que sí llegan 41, 43 i 141 en sus viajes hasta Sant Adrià.

La ciudad de Sant Adrià no tiene un sistema de transporte público propio. O sí lo tuvo; durante un largo tiempo tuvo uno de iniciativa privada, la “Carraca”, un único y viejo autobús que se oía llegar de lejos y que durante un tiempo tuvo parada el La Mina. La flota que actualmente circula por el barrio la forman autobuses de TMB (43 i 141)  los vehiculos amarillos de la empresa badalonina TUGSAL (B20 y B23, el B26 también se suprimió).

Y en el ultimo año, debido al cierre del paso inferior que conecta La Mina con La Catalana por las obras que se hacen en el barrio vecino,  todas la líneas han dejado de atravesar el barrio (pasaban por la calle Fernandez Marquez) para rodearlo por el margen (circulan por la calle Cristòbal de Moura)

Pero la historia parece estar condenada a repetirse. La flamante línia transversal H12, que atraviesa toda Barcelona, se acerca pero no llega. De nuevo se queda a las puertas del barrio.

Desventajas de ser frontera; desventajas de pertenecer a un lugar, pero aparentar ser de otro.

Metro:

15 de octubre de 1982. Se inaugura la actual estación de metro de Besós Mar, en la calle Alfons el Magnànim de Barcelona, como resultado de la ampliación de la línia IV, la amarilla, del metro barcelonés. Ya la inauguración no empezó con muy buen pie. El alcalde olímpico de Barcelona y promotor de la transformación del Besós, Pasqual Maragall,  no asistió a esa inauguración; estaba viajando por america latina. Pero no acaba aquí la cosa, los actos de inauguración de la nueva línea, no incluyeron a Sant Adrià del Besòs

Estación de Metro de Besòs Mar – (foto wikipedia)

Besòs Mar es la estación mas próxima a La Mina. En un intento cortés de darle visibilidad al barrio, el primer nombre para la estación fué La Mina. Pero la estación está en el barrio del Besòs i el Maresme, en el distrito de Sant Martí de Provençals de Barcelona, a más de 400 metros de La Mina.

La polémica estaba servida. Será por que La Mina acredita una fama a menudo injusta con toda su realidad,  la oposición vecinal de la gente del Besós hacia el nombre de su nueva parada de metro provocó que finalmente la estación, en la ampliación de la línia hasta Pep Ventura en Badalona cambiara su nombre por el actual de Besòs Mar. O sea que La Mina, tiene pero no tiene metro

Más adelante, se inauguró la estación del Maresme Fórum. Turistas y algunos barceloneses ya podian llegar en transporte público al Port Fórum, a sus eventos de vocación universal y a los festivales primaverales de música que retumban en las noches de un barrio de La Mina que desde el Fórum parece no existir.

Tranvía:

Y finalmente un transporte público, el tranvía,  si pasa y para en La Mina. Tres líneas del TRAM-Besós, pasan por el barrio. Las líneas T4 i T5 lo rodean i la línea T6 lo atraviesa aprovechando la nueva Rambla abierta por el Plan de Trasformación. Y esta vez si, una de las estaciones, ubicada en el centre de la rambla, lleva el nombre de La Mina

Estación de Tranvia La Mina – (foto www.trenscat.com)
 

Cuando se habla de instalar el TRAM por el barrio y por la proyectada rambla de La Mina se habla de la circulacion de las dos líneas por la rambla haciendo que la parada de la Mina funcione a modo de intercanviador.

Asi la T5 que viene por la Gran Vía bajaría por la rambla hacia la estación de Sant Adrià y la T4 que baja por la Diagonal subiría por la rambla hacia Badalona. Esta distribución haría que hubiese convoys cada pocos minutos en el barrio y que la gente se parase unos instantes en el barrio (como sucede en Glòries). A esta posibilidad se le denominaba circulación en X. Así el TRAM se transformaría en verdadero elemento identificador y transformador del barrio (por fin un transporte público pasa por el barrio y no sólo eso sino que haria parada y fonda)

 

Pero momentos antes de la inaguración de la T5 (la T4 se inauguró antes y pasaba por Can LLima dirección a la estacion de Sant Adria) se creo la T6!!! Esta nueva línea hacía el servicio entre Gorg (Badalona) y la estación de Sant Adrià haciendo parada en la parada de La Mina (en la rambla). La T5 pasaba de largo por el barrio y seguía su camino hacia el centro de Sant Adrià y Badalona. Así la X hipotética se convirtio en una C algo inútil y cateta (la T6 tenía una frecuencia de paso muy baja y de sus ocho estaciones,  7 estaban duplicadas por la T5 y la T4)

Así el barrio volvia a ser el paisaje que se ve desde los cristales del transporte metropolitano

Esta distribución no evito que al final y principio de la rambla se habilitase un megacambio de agujas que permite la circulacion de convoys en una marcha y otra (arriba y abajo) y de una línea a otra. Esta instalación de un coste mostruoso y de carácter faraónico se justifica porque las cocheras del tram estan en la parte baja del recorrido, justo delante de la central térmica.

Nus superior

Tram – Nudo Superior (foto archivo desdelamina.net)

Esta distribucion duró relativamente poco y hace un par de años se volvio a modificar.

Ahora la T6 es simplemente una extensión de la T5. Así uno de cada dos convoys de la T5 no sigue hasta el Gorg sinó que baja por la rambla de La Mina hacia la estación de Sant Adrià. Esto provoca una frecuencia de paso de unos 16 minutos en las horas puntas (llegando a mas de 30 en horas valle). Ademas la T6 tiene un horario de funcionamiento menor que el de las otras dos líneas..

 

Así que sólo inagurarla,  la estación de La Mina ya empezó su devenir fantasma en medio de una rambla, cerrada en sus extremos por los cambios de agujas que ponen en difultades el acceso peatonal al Parc Besós i al mar, que podría acabar tomando el mismo camino. A pocos metros de la estación, en las siguientes paradas, una por sentido, circulan los tranvias de la T4 i T5, que llevan a los mismos lugares y con mayor frecuencia. Estación apta sólo para gentes despistadas, turistas o autòctonas

Alguien de origen francés, despistado pero no sabemos si turista o no, dejó filmado en la red el recorrido de una unidad de la línea T6 a su paso por el barrio (deberemos explorar más a fondo esa vinculación francesa recién descubierta)

 

 

 

Quedará por ver si algún dia se concretará la unión de TRAMBaix i TRAMBesós que tiene en su haber el dudoso proceso participativo de la Diagonal celebrado en Barcelona el 2008; pero esa es otra historia y de otra ciudad.

Si nunca se produce esa unión de redes tranviarias, quizás entonces podremos hablar de que finalmente La Mina tiene conexión directa con el centro de sus ciudades

Bicicletas

Y cerramos con el transporte público más moderno llegado al Barrio. El Freecing, una variante  local gratuita del servicio de alquiler de Barcelona, el Bicing. En el barrio aparecen bicicletas rojas barcelonesas  a pesar de que los carriles bici mueren en ninguna parte antes de entrar en él. Alguién las utilizó para llegar a La Mina y luego las abandonó.

Pero el barrio las incorpora y las tunea y estas versiones hackeadas circulan por nuestras calles.

Hace un par de años, el fenómeno era de una magnitud considerable y se podían llegar a recoger más de media docena de bicicletas cada dos días. De esta tarea se encargaba Paco, que hacia batidas por el barrio, recogía las bicicletas y las llevaba a la nueva Comisaria de los Mosos, en la Rambla, al lado de la estación del tranvia.

Así, la Comissaria de los Mossos de Esquadra de La Mina se convirtió en la “estación” más meridional del modernísimo Bicing.

Actualmente, tiempos en que el freecing ya no está tan de moda, una furgoneta oficial del servicio municipal hace una batida semanal por el barrio a la búsqueda de las unidades que el moderno sistema informático da por desaparecidas.

 

En el barrio también opera Minacleta, un servicio comunitario de prestamo de bicis; 15 bicis cedidas por el ayuntamiento procedentes del depósito municipal que son utilizadas en la actividad ciclista de las fiestas del barrio.
 

El esperador de autobuses

Si estáis siguiendo esta serie de articulos, Una Mina de leyendas, ya sabréis de la presencia de artistas de renombre en el barrio. Pero el barrio tiene su propia capacidad creativa autóctona.

Os dejamos una muestra de arte minero, kitsch, reivindicativo y popular: El esperador desconocido de autobuses

 

 

 

 

 

 

La imagen que acompaña este articulo forma parte de la lámina que Guillem Pla nos ha hecho para los artículos de "Una mina de leyendas".