El pasado domingo 25 de septiembre la comunidad parroquial de La Mina celebró la Fiesta de la Mare de Déu de les Neus. En una celebración alegre y participada nos reunimos mucha gente de la parroquia y del Barrio y nos acompañaron personas vinculadas a nuestras actividades. La celebración fue también la despedida de Ramón Muray, nuestro párroco hasta este verano.
En la celebración estuvieron los miembros de la comunidad salesiana y, además de Ramón, nos acompañaron Mn Francesc Vilamala (párroco durante 15 años) y Jesús Mari Vergara.
La ceremonia empezó con la ofrenda de flores a la Virgen por parte de algunas entidades del barrio más vinculadas a la parroquia: El Pessebre Sant Adrià, el Casal de la Gent Gran, la Cofradía de la Santa Cruz, la Hermandad Virgen de la Rocina, el grupo Iris, la asociación de las Adrianas, el grupo de Alfa-Costura y la Asociación de Vecinos de la Mina.
Después los diferentes grupos de la parroquia llevaron las ofrendas.
Al final de la Eucaristía, Maria Oller, en nombre de la comunidad parroquial, dedicó unas simpáticas palabras de agradecimiento a Ramón Muray, que ha dejado de ser nuestro párroco y le deseó una feliz etapa en su nuevo destino en Terrassa.
La comunidad le hizo un obsequio y Ramón respondió con unas palabras de agradecimiento por los años compartidos en la parroquia y en el barrio.
Para acabar se cantaron los “Goigs a La Mare de Déu” que este año sonaron especialmente bien. Después pudimos compartir un refrigerio en los locales y saludarnos y charlar.
La entrada del nuevo párroco.
Al domingo siguiente, el 2 de octubre tuvimos otra celebración en la que el Vicario Episcopal Mn Joan Galtés presidió la toma de posesión del cargo del nuevo párroco, Juanjo Rodríguez.
En una sencilla ceremonia compartimos con alegría nuestra fe con algunos gestos que simbolizaron la entrada del nuevo párroco. También hubo un detalle para él: Una figura de un Buen Pastor, que significa que ha de ser un buen guía de nuestra comunidad parroquial imitando a Jesús.
Han sido dos semanas con unas sencillas celebraciones que nos ayudan a sentirnos una familia, una comunidad parroquial y parte activa de nuestro barrio.