Con este nuevo articulo,  que firma J. Francisco Marín, agradecemos y damos continuidad a la colaboración de BISAUCII: Col·lectiu urbà del Besòs, que reflexionará desde y sobre los espacios de estudio y las movilizaciones sobre las reformas del Port Vell y otros puertos de la fachada marítima del Área Metropolitana de Barcelona

Las propuestas ciudadanas que nunca han cesado  -aunque siempre han sido perseguidas, intencionadamente malinterpretadas y  silenciadas por las administraciones- por una ciudad como ámbito de vida de los vecinos sigue surgiendo desde las palabras, los informes y las propuestas de los incansables de toda la vida.

En la sede de la FAVB se ha tenido el encuentro de una serie de entidades vecinales de la amplia Barcelona el pasado viernes, 19/04/2013, más allá y como iniciando una nuevo recorrido a partir de las conclusiones habidas tras los análisis universitarios y movimientos vecinales de los que hemos ido dando cuenta en fechas anteriores.

En la última reunión a la que nos referimos estuvieron presentes más de 40 personas vinculadas a muchas de las asociaciones, plataformas y entidades vecinales de los barrios de la fachada marítima (Poble Sec, Casc Antic, Barceloneta, Poblenou,… Sant Adrià de Besòs)

Sobre la mesa de debate estuvo el tema básico: ¡la participación que queremos es una participación activa, de personas!

Exigiendo este modelo de participación se analizó la realidad configurada sobre Barcelona a partir del modelo de “ciudad turística” construida por los poderes políticos y económicos. Y el susto que nos quieren meter en el cuerpo, destrozando la red social y comunitaria, al bocinazo de que “estamos en tiempos de crisis”.

Como paradigma en la reforma alternativa propuesta desde los movimientos vecinales está la realidad de que cualquier reforma ha de estar en función de los vecinos y habitantes de la ciudad y no, en manera alguna, para provecho de intereses foráneos y extraños a las personas.

Se ha de romper con la “lógica liberal” del siglo XIX y la “neo-liberal” del XX y lo que llevamos del XXI.

Territorialmente esta transformación se ha de enmarcar no en los muros de la vieja Barcelona sino en la realidad de una Barcelona que abarca de hecho lo que bien se puede denominar “Àrea metropolitana”.

De ahí que, desde el Llobregat al Besòs, se ha de reconsiderar las nuevas estructuras urbanísticas que enmarquen una real transformación de la fachada marítima. No debemos trazar una línea divisoria porque el Port Fòrum esté en el límite municipal de Sant Adrià, cuando la acera izquierda de la calle Sant Raimundo de Penyafort es de Barcelona y la de la derecha de Sant Adrià. Tanto como que la nueva relación de esta Barcelona ha de encuadrarse desde los barrios del mar hasta los que se deslizan por la montaña.

 Y se ha de tener muy en cuenta de no permitir lo que en otras ocasiones ha llevado a la destrucción del hábitat de las personas con menos recursos, culpabilizando lo que desde el poder denominaron “periferias urbanísticas, económicas y sociales”, refiriéndose a los barrios marginados que ellos construyeron y crearon para hacinar a la población en la pobreza urbanística y económica.

Los “Ports” no se pueden admitir como lugares “estratégicos” cerrados al uso y disfrute de los ciudadanos como verdaderos y bien conectados “espacios públicos” con el resto de la ciudad. Ni tampoco como espacios al margen de las normativas en vigor medioambientales y urbanísticas.

¡NO a la reforma especulativa de Port Vell!
Una estructura urbanística nueva al servicio del vecino. De mar a montaña, del Llobregat al Besòs.

J. Francisco Marín
BISAUCII, Col·lectiu urbà del Besós

La foto de portada está realizada por mingusmutter

Las fotos del articulo son de J. Francisco Marín