Porque los mapas sólo tienen una pequeña leyenda a un lado y necesitamos más hitos que nos sirvan de guía, hemos decidido hacer un relato de las entidades y servicios del barrio que nos acompañen en nuestra travesía. Valle realiza este mapa sensible donde poder encontrar los puntos cardinales.

En este caso nos detenemos con la Fundació Pere Closa.

Esta vez me reciben las dos técnicas de la Fundación Pere Closa que trabajan en el barrio, Nieves y Marta. Llego a la biblioteca, y subo a una de los espacios que utilizan para dar clases. Es amplio, y cuenta con tres mesas grandes, rodeadas de sillas, y en las paredes cuelgan mapas y otros posters en los que apoyarse durante las explicaciones. Cuentan con otra aula, que se sitúa al lado de este, para desarrollar mejor la actividad.

Comenzamos desde el inicio, con un poco de historia, y me explican también los principales proyectos y sobre todo el más antíguo de ellos, en el que trabajan, el Siklavipen Savorença, (Educaciò amb Tothom).

¿Por qué este nombre? Pues porque no trabajan sólo refuerzo escolar, sino que trabajan todos los ámbitos que puedan afectar a un niño en su desarrollo educativo, desde el refuerzo escolar. El requisito para acceder al servicio, tener ganas de aprender e ir al colegio, así como superar los diferentes cursos y problemas que puedan surgir por el camino. Querer, realmente, estudiar y trabajar para ello.

Porque eso sí, entienden y así lo hacen ver,como un espacio importante de aprovechar para los chavales que allí acuden, y piden por su parte el mismo compromiso que ellas tienen con el proyecto. Por lo que si no se acude regularmente, se les da de baja, teniendo siempre la opción de volver a incorporarse en septiembre.

Ellas por su parte, además del refuerzo educativo, intentan dar todas las posibilidades de formación que busquen, además de apoyos económicos u otros asuntos, que necesiten, no centrandose sólo en las aulas, sino en la persona en su completo.

Para llevar a cabo Siklavipen Savorença, están ellas dos, dos monitores, un ingeniero químico y un politólogo, ambos gitanos; y una voluntaria, la única del proyecto en las diferentes zonas de actuación, que fue en su momento maestra en el barrio. Dicen procurar ser un referente, un nuevo referente, un ejemplo para los chavales de la posibilidad de mantener la cultura propia, y potenciarla, y abrirse nuevos caminos en la vida.

El objetivo principal del proyecto es “potenciar a los chavales al máximo, motivarlos, para que puedan sacarse la secundaria, e incluso, estudiar estudios postobligatorios, fp, ciclos formativos, io la universidad”.

El refuerzo escolar está dirigido a niños de primaria, secundaria, y de postobligatoria, repartiendo las horas de de clase a lo largo de de las tardes, de lunes a viernes, exceptuando el martes.

La Fundación cuenta también con otros proyectos como la promoción educativa, centrada en combatir el absentismo escolar, con una persona gitana presente en el colegio para desarrollar esta labor; y de difusión de la cultura gitana, donde se trabajan cuentos y música propia, además de la historia de esta cultura, en centro y colegios, en pequeñas sesiones.

Trabajan, o procuran trabajar todo lo que se pueda, en red también. “Solemos estar convocadas en todas la actividades del barrio, e intentamos estar presentes en todo ello”. Organizan también algunas actividades puntuales, con entidades concretas, como con Grupo Unión, el concurso de Sant Jordi. “La Mina tiene una gran riqueza comunitaria”, comentan, y esto es muy importante.

Resaltan, como problema fundamental del barrio, y de muchos otros, el consumo y tráfico de droga, y los problemas que ocasiona en el barrio. A su vez, el gran sentimiento de barrio, de pertenencia que se observa en la gente, ya no sólo que vive aquí, sino en la que participa en su día a día.

Me hablan de un cambio de perspectiva en lo referente a la educación en el barrio, en todos los niveles. Tanto entidades o grupos, como la administración, como las familias, parecen tener otros conceptos de la importancia de una educación de calidad para todos, que sea accesible a todo el mundo y que potencie y apoye a quien lo necesite. Por ello hay una mesa en la que se trabaja el Plan Educativo de Barrio, donde Nieves y Marta participan con muchas otras asociaciones. “También el cambio de chip de las familias”, comenta Nieves que vive en el barrio, “antes lo de llevar a tu hijo a la guarderia no era importante, y en muchos casos no estaba bien visto, ahora se ve la importancia de que se estimule y potencie al niño, para un mejor desarrollo educativo posterior”.

Han notado muchos cambios en lo relacionado con la educación en los últimos años. Y no sólo a nivel de cambio de trabajo en el entorno, sino también en los propios chavales.

Mirando números, de otros años, me comentan en aumento que están viendo en personas con ganas de estudiar e ir ampliando su formación personal, y mientras lo cuentan, se les va abriendo una sonrisa que les cubre la cara. Por que el comenzar a ver el cambio que intentas provocar, es increíble.